CONSULTORÍA

Todos recordamos la famosa anécdota del consultor y el pastor. (1)

“Has venido sin que yo te llamara, me estás diciendo algo que ya sabía y suelta el perro que no sabes nada del negocio”.

Una de las características básicas que definen la consultoría es la honradez de las personas que las realizan.

No basta con comprarse un portátil y ya soy consultor, asesor y coach.

Tendríamos que ser honestos para poder ejercer nuestra labor desde un punto de vista ético:

1)     Establecer ofertas de servicios con objetivos a alcanzar, cronograma de actividades, dedicaciones planificadas y valoración económica.

2)     Ayudar a las empresas en aquellos ámbitos en los cuales por mi experiencia y cualificación pueda aportar un valor añadido.

3)     Establecer indicadores de seguimiento del proyecto.

4)     Comprometerme con las organizaciones con las que colaboramos y no centrarse sólo en el resultado sino también en el camino.

5)     Permitir medir el grado de satisfacción de la empresa respecto a los servicios que ofrezco.

La ética empresarial se basa también en una profesionalidad en los servicios de asesoría que recibimos y en la integridad en las empresas y expertos que los ofrecen.

(1)

Un pastor cuidaba de sus ovejas, cuando avistó en el horizonte un vehículo 4x4 que se acercaba. Al llegar al lado del pastor, la camioneta se detiene. Desciende un hombre que, sin presentarse, pregunta al pastor:

– Si le digo cuántas ovejas tiene usted aquí, ¿me daría una?

El pastor humildemente dice que sí.

Rápidamente el hombre saca su “2 en 1" de ultimísima generación, se conecta vía satélite y al instante responde:

– “335 ovejas".

El pastor, sin decir nada, le da una oveja y le dice.

– Si yo adivino su profesión, ¿me devolvería la oveja?

– Claro que sí – responde el hombre.

– Usted, señor, es un Consultor –afirma de forma contundente el humilde pastor.

Estupefacto, el hombre devuelve la oveja al pastor, no sin antes preguntarle a éste cómo lo había adivinado.

– Fácil –responde el pastor–. Un hombre llega aquí sin ser llamado, se mete en mi negocio, me dice algo que yo ya sabía, y encima pretende cobrar por eso.